Un día más con vida
Género: animación documental.
Tienes que verla porque: es un cómic en movimiento que se escapa de la pantalla.
Es 1975 y el polaco Ryszard Kapuscinski es un reportero de 42 años. Su veteranía en guerras y conflictos de Congo, Ghana, Benin, Guatemala u Honduras no había hecho mella en la personalidad de este periodista idealista y amigo de las causas perdidas. Ese año viaja a Angola, sumida en una rebelión anticolonial contra Portugal que acabó convirtiéndose en una batalla de la Guerra Fría y se alargó en una eterna guerra civil que duró con algunos paréntesis hasta 2002.
El país africano y las personas que conoce en su aventura, como la carismática guerrillera Carlota, de solo 19 años, cambiarán a Kapuscinski para siempre. El viaje suicida al corazón de las tinieblas transforma al periodista en escritor. Basado en esta experiencia publicará un año más tarde el libro Un día más con vida, en el que ahora se apoya esta singular película de animación creada por el documentalista español Raúl de la Fuente y el director polaco Damian Nenow.
Raúl de la Fuente ha recorrido el mundo dirigiendo y escribiendo guiones para documentales, cortometrajes y programas de televisión. Su trabajo Minerita ganó en 2014 el Goya al Mejor Cortometraje Documental.
Un día más con vida se siente como un cómic animado, con unos movimientos contenidos que se desbordan en los momentos cumbre.
Apuntalan la película fotografías históricas de Kapuscinski y testimonios de los protagonistas supervivientes que dan una especial profundidad documental a Un día más con vida. En su periplo por Angola, los habitantes del país se ponen delante de la cámara del reportero con la intención de no ser olvidados del todo.

La historia presenta a un periodista intrépido, un hombre de acción dispuesto a arriesgarse para llegar a LA HISTORIA con mayúsculas, aunque esto le genere un conflicto sobre la neutralidad del reportero de guerra.
El cartel
El tráiler





Esta película un día más con vida no es animación ni debería catalogarse dentro del género de animación, eso es un grave error y un desmerecimiento del trabajo de los animadores de verdad. Esta técnica de rodar todo en imagen real y tratar las imágenes digitalmente y puro rotoscopio no pertenece a nuestra profesión y no íntervienen animadores. La animación es otra cosa señores y principalmente es para un público infantil o home family entertainment. No se equivoquen.